En tiempos de cuarentena, el cáncer de piel no se detiene.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud anualmente se presentan 1.329.779 de casos nuevos de cáncer de piel, de los cuales 287.723 corresponden a melanoma, causando 60.712 muertes.
En Colombia, según los datos del Instituto Nacional de Cancerología, se diagnostican anualmente 5.873 casos nuevos, de los cuales, 1.188 corresponden al melanoma, con 226 muertes por esta causa. Para este año 2020, en el mundo 55.488 personas morirán de cáncer de piel y en Colombia, de 1.203 casos diagnosticados, 226 pacientes morirán.
Sin embargo, durante la cuarentena estas cifras podrían aumentar, especialmente porque las personas no son concientes de que los riesgos persisten y dejan de tomar medidas preventivas o realizar conductas que permitan la detección temprana, como son: el autoexamen de piel, consultar a tiempo o recibir un tratamiento oportuno.
Se pueden mencionar tres aspectos que son fundamentales para el manejo del cáncer de piel durante la cuarentena:
Hacer énfasis en la prevención
Promover la detección temprana
En caso de tener ya un diagnóstico de cáncer de piel, conocer si debe o no manejarse de forma prioritaria a través de la asesoría por el especialista.
Con respecto a la prevención se debe tener en cuenta:
El protector solar no se aplica dentro de casa para evitar las quemaduras solares, ya que es poco probable que esto ocurra cuando se está bajo techo. La razón por la cual se debe continuar realizando la aplicación diaria de un protector solar de amplio espectro, es porque la radiación ultravioleta de tipo A, entra a las casas a través de ventanas, balcones o terrazas, independiente del clima que se presente, y este tipo de radiación también está relacionada con el proceso de formación de cáncer de piel.
Se debe además evitar exposiciones intencionales a patios, balcones o terrazas con el fin de obtener un bronceado de la piel.
Se debe exponer de forma controlada partes del cuerpo sin ropa, como las extremidades para favorecer la síntesis de vitamina D. Esto debe realizarse durante aproximadamente 10 minutos, 3 veces a la semana. Además se puede complementar con la alimentación rica en esta vitamina o con suplementos vitamínicos.
Se debe continuar utilizando medidas de protección solar como ropa adecuada, accesorios como sombreros, gorras, gafas y protector solar cuando se salga de casa.
Se debe evitar el uso de cámaras de bronceo con el fin de sintetizar vitamina D o buscando efectos antimicrobiano, ya que estos son dispositivos que se incluyen en la categoría de cancerígenos.
Las medidas de protección deben ser realizadas por todos, independiente de la edad, género o color de piel.
Con respecto a la detección temprana se debe tener en cuenta:
Realizar el autoexamen de piel una vez al mes, con la piel desnuda, con la ayuda de un espejo y revisando de forma sistemática de arriba hacia abajo y de adelante hacia atrás, para no olvidar mirar ninguna zona, incluso cuero cabelludo, palmas, plantas y genitales.
Estar atento a la presencia de nuevos lunares o a cambios en los ya existentes. En caso de ver algo que parezca sospechoso, aplicar la regla del ABCDE.
Estar atento además ante la presencia por más de un mes de lesiones que no cicatricen, sangren, descamen, duelan o que aumenten de tamaño.
En caso de presentar este tipo de lesiones consultar al dermatólogo ya sea de forma presencial o a través de la teledermatología.
En caso de ser paciente mayor de 70 años, inmunosuprimido, con enfermedades cardiovasculares o respiratorias o con sobrepeso, es preferible consultar de forma virtual con el fin de evitar el contagio con la Covid-19 y el desarrollo de una enfermedad grave.
Con respecto al tratamiento oportuno del cáncer de piel en cuarentena, es importante que el paciente logre tener la consulta con un especialista para que de acuerdo al diagnóstico y las características del tumor, logre determinar si el caso debe manejarse de forma prioritaria o si puede posponer temporalmente mientras el escenario público brinda condiciones más seguras para evitar la infección por el coronavirus.
En general se considera que casos de carcinomas basocelulares o de carcinomas escamocelulares de bajo riesgo, pudieran posponerse por unos meses, mientras que en los melanomas se sabe que si se diagnostican en estados tempranos y se trata de manera apropiada tiene buen pronóstico con más del 95% de sobrevida de a los 5 años; en cambio cuando este tumor se diagnostica y maneja en estados avanzados tan solo menos de un 20% sobreviven a los 5 años.
Otras formas de cáncer de piel, requieren también ser evaluadas por el médico especialista para determinar la prioridad en cada caso. Por fortuna la pandemia ha permitido en avance de la teledermatología para ofrecer consultas y asesorias de alto nivel de calidad en la población.